miércoles, marzo 21, 2007

En un abrazo no cabe nada...

A veces siento que hay un mundo que me sobrepasa
A veces siento que lo quiera o no ese mismo mundo también es mío

A veces… siento… cuando no quisiera sentir siempre…

Solo quisiera pensar y olvidarme de que también hay que sentir para poder continuar…

Siempre quise no ser buena, sino la mejor
Al principio quise serlo para jactarme de mí…
Pero luego aprendí que hay mejores formas de jactarse de sí mismo
Cuando estamos siendo mejor para el resto…

Siempre quise abrazar el mundo de esos pequeños niños para cubrirlo y protegerlo
Pero a veces siento frustración
y siento pena porque
Ni estirando los brazos, ni apretando mis manos contra sus espalditas pequeñas
Podría llegar a contener toda esa pena que borbotea de esa pequeña existencia…
Ni aún renunciando a todo lo que soy y lo que tengo
Podría llegar a llenar ese vacío

Fue entonces cuando descubrí
Que hay personas con vacíos que pareciera jamás podremos cu
brir
Ni siendo los mejores ni aún cuando entregamos todo lo que somos o tenemos…
Y que nunca el tiempo es suficiente para una relación de dos…

Y que “todo”

Nunca es suficiente…

Descubrí que existen pequeñas razones para mover grandes dudas del corazón…
Y que existen pequeños corazones que no son capaces de mover grandes razones

Hoy conocí el corazón de un hombre
De una paupérrima vida…
Cuyas monedas escasas tintineaban en su escuálido bolsillo
Cuyos ojos profundos y de o
scura y lustrosa mirada
Me calaron hasta querer renunciar a esa entrevista

Y dejarlo todo porque ya no podía más seguir escuchando esa historia
El dolor ajeno y agudo que causa fragilidad y pequeñez:
¿Quién era yo sino un parásito de la vida?
Yo, que tenía amor todos los d
ías, yo que tenía una cama donde dormir
Yo, que tenía una caricia que recibir y un pan tostado para comer…




A veces… siento… cuando no quisiera sentir siempre…


Nunca había conocido la diferencia
Entre la pobreza y la miseria

Y hoy supe que la primera podía llegar a ser una casualidad del destino
Pero que la segunda es una escoria de elección personal…

Nunca había conocido cuan difícil es tratar de pensar
Cuando sientes el corazón latir en tus propias manos
Que también se vuelven insuficientes para contener el propio desazón…
Cuando la no concordancia mente-corazón se vuelve un desconcierto total…

Hoy no hubo consuelo
No hubo respuestas a mis reiterados por qués
Hoy Dios tampoco estuvo en clases para contestarme

Mi único bálsamo disponible
Fue bajar las escaleras y encontrar a su pequeña

Parada y vestida con ese delantal cuadrillé desaliñado

Con esas dos trenzas negras y con su carita morena y atónita

En un abrazo no cabe nada…

En un abrazo no cabe nada…